Mercado recidencial

La migración de la población húngara es muy baja, por lo cual generalmente cambia de domicilio dos veces a lo largo de su vida. La tendencia de los húngaros es que prefieren comprar viviendas antes de alquilarlas.

El motivo principal de la compra de vivienda hoy en día es la tendencia a la independencia de los jóvenes. En Hungría el número de aquellos que comprarían una vivienda por este motivo sobrepasa el 40% - del cual el 72% son menores de 35 anos. Una cuarta parte de los compradores cambia su antigua vivienda por no estar satisfecho con el tamano de la misma o con sus condiciones de confort.

El tipo de vivienda más popular es, sin duda, el piso de dos habitaciones (en Budapest, el 30% de los compradores busca este tipo de vivienda).

El hecho de que las viviendas de menor tamano se vendan mejor, se debe únicamente a que el poder adquisitivo del húngaro promedio no le permite comprar un piso de mayor tamano, y le da más importancia al valor total que al valor de m2.

El tamano medio de la vivienda húngara hoy en día a nivel nacional es de 86 m2, mientras que a nivel de la capital Budapest,  es de 67 m2.

Es cada vez más visible el fenómeno de que las familias, por su crecimiento,  quieren mudarse a viviendas más grandes, manteniendo el mismo nivel de vida o mejorándolo. Esto genera la demanda por las viviendas cuya distribución permite tener dos o tres dormitorios, más el salón.

Las viviendas pequenas de tipo estudio ya no se venden tan bien como hace algunos anos. Incluso aquellos que buscan viviendas pequenas, procuran comprar viviendas con mínimo un dormitorio más salón.

En caso de las construcciones de más nivel, para el comprador húngaro, aparte de la ubicación y precio, también es un factor importante el tamano de la terraza, mucha zona verde y la separación del vecino.